sábado, 2 de mayo de 2009

Buscando afinidades


"La noche sugiere, no enseña.La noche nos encuentra y nos sorprende por su extrañeza; ella libera en nosotros las fuerzas que, durante el día, son dominadas por la razón…”
Brassai.

El bueno de Gyula se dedicaba noche tras noche a sacar su vieja cámara y captar el devenir. Quizás jugaba a engañarse, pensando que ese devenir no era el suyo, sino el de la imagen. O quizás prefería sentirse dueño de la pequeña fracción de espacio y tiempo que solo el había vivido, sentido, pensado y entendido, sabiendose como el único que podría disfrutarlo, y como poderoso, al tener entonces la capacidad de engañar a cuales quieran creer sentirse reales en una escena ajena, captada y pasada, arrancada e impregnada en su nuevo contexto efímero, patético, cómodo y móvil: Un pequeño recorte de papel, condenado a pudrirse en el triste castigo de la eternidad...