domingo, 16 de noviembre de 2008

Cthulhu



Tan denigrante...

Tan poderoso...

Lo dentra en la cabeza... De la cabeza se va...

PD: Pido perdón aquí y ahora ·_·

viernes, 14 de noviembre de 2008

Y yo decido.

El aire será veneno para todos los violadores del aire.

domingo, 9 de noviembre de 2008

El valor de la palabra

De tanto en tanto, en noches frías y oscuras, algunos seres formidables paran a escuchar el silencio de sus propias almas.

Decir de su dificultad gastaría más líneas que la presente de forma inútil, pero basándonos en aspectos generales vale la pena pensar en el silencio y sus consecuencias.

Si bien es sabido que una palabra amable u horrible afecta a tu estar, aún más lo hace la silenciosa indiferencia. Y que decir de la gran cita, que viene a ser algo como “Es fácil saber hablar pero indiscutiblemente difícil saber callar”…
Por lo tanto el silencio se presenta como un arma de doble filo, más allá de una molesta consecuencia de actos no premeditados.
Quien dice que amaría el silencio si pudiese experimentarlo, no lo dice de verdad, pues solo quien lo busca lo encuentra.
Pero una vez hallado, ¿Cual es la impresión? Familiarmente desconocida…Ya estaba ahí, pero no había tiempo para encauzarlo.

Y aquí comienza la adicción. No terminas de saber a qué exactamente, pero terminas adicto… Y… Necesitas ruido, pero todo esta demasiado quieto. Necesitas calma, pero todo lo que la produce está demasiado lejos. Necesitas palabras vacías, como antaño, pero solo encuentras papel en blanco. Necesitas calor, pero no recuerdas el color del humo. Los cielos solo ceden lluvia, y las banderas resultan ininteligibles. Las drogas sustanciales no alcanzan el poder de la nueva y nada llega para quedarse realmente.
Lo sagrado es cuento y la tradición leyenda.

Es entonces cuando olvidas cual era el sonido que producían el sonido de tus cuerdas vocales. Cuando el remordimiento y la culpa deja de existir. El recuerdo deja de ser un dogma. El prejuicio pasa a ser instinto y el ideal, historia… Y la necesidad… innecesaria.

Si solo somos palabra… el silencio acabará con nosotros… Y nos hará libres